Bicicleta holandesa
Si lo que buscáis es un medio de transporte de uso diario ecológico y con una ergonomía insuperable, esta es vuestra bicicleta. Este estilo se caracteriza por la conducción con la espalda erguida, convirtiendo cada pedalada en un auténtico placer. Actualmente existe una gran oferta en el mercado, ofreciendo modelos para ambos sexos con diferentes equipamientos y calidades, pero siempre fiel a un denominador común: la esencia clásica
Bicicleta de trekking
A este estilo de bicicletas también se les conoce como “híbridas”, dado que son una mezcla entre una bicicleta de montaña y una de carretera. Sus ruedas son de 28” pero algo más estrechas que las mountainbike, y su cuadro suele ser más ligero que el de éstas. Se suelen usar para hacer cicloturismo, por lo que es común equiparlas con portabultos, alforjas y elementos de iluminación, aunque también soy muy utilizadas para los desplazamientos diarios en la ciudad.
Bicicleta plegable
Si lo que buscáis es comodidad y practicidad para el día a día esta es vuestra bicicleta. Su tamaño reducido una vez plegada y su ligereza (entorno a 11kg) la convierten en un aliado perfecto para quienes no dispongan de mucho espacio para su almacenaje o para los que emplean también el transporte público en sus desplazamientos cotidianos. Quizás disponga de poca capacidad de carga y la postura ergonómica no sea la más natural, pero su versatilidad la convierte en una buena alternativa de transporte urbano.
Bicicleta de montaña
Es quizás el modelo de bicicleta más extendido en la sociedad, y como su propio nombre indica, está diseñada para viajes por la montaña y el campo, aunque es normal verlas circular por cualquier otro entorno más urbano. Existe una inmensa variedad de modelos en el mercado dependiendo de sus características: material del cuadro, tipo de frenos, suspensiones, calidad de los cambios, etc…
Bicicleta eléctrica
Son bicicletas que llevan incorporado un motor eléctrico que proporciona una ayuda al pedaleo. Este tipo de vehículos tienen muchas ventajas: son eficientes, rápidos, ecológicos y saludables, entre otras.. Con una bicicleta eléctrica podrás subir pendientes con poco esfuerzo; otro dato a tener en cuenta es la autonomía de las mismas, oscilando entre los 35-60 Kms. Reglamentariamente no puede superar los 25 km/h y el motor debe detenerse al dejar de pedalear. El único inconveniente es su elevado coste, ya que las encontramos desde los 1000€ en adelante.
Bicicleta de carretera
Este tipo de bicicleta está concebido para la velocidad, por lo que está diseñada con ángulos de asiento y frontales muy verticales para que el ciclista adopte la posición más aerodinámica posible. Los materiales empleados en su construcción suelen ser aluminio y fibra de carbono, creando una estructura muy ligera. Los neumáticos de estas bicicletas son estrechos y de alto rendimiento ( de 18 a 23mm) y el manillar es de postura baja para ofrecer menor resistencia
Bicicleta fixie
También llamadas “de piñón fijo” o ”fixed,” sus principales características son la monomarcha y la carencia del piñón libre, por lo que al no tener punto muerto, no se podrá dejar de pedalear mientras la bicicleta esté en marcha. Para frenar hay que hacer con los pedales la fuerza inversa al sentido de la marcha. Actualmente existe una amplia y colorida gama de componentes para esta clase de bicicletas, permitiendo realizar modelos muy personalizados. Las fixie son las preferidas por los mensajeros de NYC dada su ligereza, bajo mantenimiento y su estética pura y minimalista.
Bicicleta cruiser
Son las conocidas como “beach cruiser” o bicicleta playera. Fueron muy populares en los años 50 y 60; se caracterizan por llevar “neumáticos de balón”(26×2,125), o sea, más anchos que el resto de modelos de bicicletas. Se trata de una bicicleta de paseo híbrida entre urbana y de montaña, suele ser monomarcha y su freno a contrapedal.
Y ahora que ya conocéis las características de las clases de bicicletas más comunes, ¿Cuál es la que mejor se adapta a vuestro estilo de vida?